Riesgoso, dejar a China fuera del análisis global

Bitácora del director

Pascal Beltrán del Río

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| 14 Mar 2025 - 09:16hrs

Fijada nuestra atención en temas nacionales como la inseguridad, el estancamiento económico y los posibles aranceles de Estados Unidos, así como en el segundo mandato de Donald Trump y la amenaza rusa a la paz internacional, hemos desatendido lo que ocurre en China. Ignorar los hechos en la segunda potencia mundial puede ser costoso, pues son pieza fundamental en el panorama global.


Por ello, me propuse revisar lo sucedido en las recientes reuniones plenarias del Congreso Nacional del Pueblo (CNP) y la Conferencia Consultiva del Pueblo Chino (CCPC) en Pekín, conocidas en la jerga política del país dirigido por Xi Jinping, como Li?ng Huì (“Dos Sesiones”). Durante estas reuniones se abordaron temas clave: ambiciosos objetivos de crecimiento, modernización militar y retos sociales.


El Informe de Trabajo del Gobierno, presentado por el primer ministro Li Qiang el 5 de marzo, puso sobre la mesa metas económicas ambiciosas: mantener un crecimiento del PIB cercano a 5%, alcanzar un déficit fiscal récord de 4% del PIB, contener la inflación a 2% y crear más de 12 millones de empleos urbanos. Sin embargo, estos objetivos se plantean en un contexto complicado por la caída en los precios inmobiliarios, la baja confianza del consumidor y las crecientes tensiones geopolíticas, lo que podría exigir estímulos adicionales.


Para impulsar la economía, el gobierno chino anunció un paquete sin precedentes. Se emitirán 1.6 billones de yuanes (220 mil millones de dólares) en gasto por déficit y 4.4 billones de yuanes (607 mmdd) en bonos especiales para gobiernos locales, destinados a financiar infraestructura, adquirir terrenos y viviendas, y saldar deudas con contratistas estatales. Además, se lanzarán 1.3 billones de yuanes (180 mmdd) en bonos del tesoro ultralargos para proyectos de seguridad nacional y 500 mil millones de yuanes (69 mmdd) en bonos soberanos para recapitalizar bancos estatales. Aun así, expertos advierten que estas medidas podrían no ser suficientes para alcanzar 5% de crecimiento, especialmente frente a la presión de aranceles y sanciones de Estados Unidos.


Otro aspecto relevante fue la recalibración en la relación entre el Estado y el sector privado. Aunque Pekín sigue apoyando a la iniciativa privada, busca un equilibrio más riguroso: se reafirma el compromiso con los emprendedores, se detienen intervenciones arbitrarias y se asegura el pago de deudas pendientes. Además, se enfatiza la innovación en sectores estratégicos como la inteligencia artificial, la robótica y la biotecnología. Los gobiernos locales compiten por convertirse en centros tecnológicos de referencia, siempre coordinados por el centro, en medio de la rivalidad tecnológica con EU.


En el ámbito de la defensa, el Informe destacó “cambios no vistos en un siglo” en la seguridad global. La modernización militar sigue siendo prioritaria, con la necesidad de que el Ejército Popular de Liberación desarrolle teorías propias y fortalezca la integración de sistemas de información en red, vital para una “inteligentización” en el combate. La política hacia Taiwán se mantiene firme, defendiendo el principio de una sola China y rechazando el separatismo, mientras se promueven iniciativas de integración económica y cultural a través del estrecho.


El componente social también fue crucial. La creciente violencia en 2024 –con ataques vehiculares e incidentes en escuelas– llevó al gobierno a reforzar la seguridad pública e implementar medidas preventivas para mejorar la resolución de conflictos a nivel comunitario, mediante mayor vigilancia y movilización ciudadana. Asimismo, se expresaron preocupaciones por el aumento de delitos cometidos por menores y el elevado desempleo juvenil, factores que, junto a la dramática caída en la natalidad, plantean desafíos estructurales para el futuro.


Las Dos Sesiones de Pekín revelaron la ambición de un país que busca equilibrar el crecimiento económico, la modernización tecnológica y militar, y la estabilidad social en un entorno global cada vez más complejo.


Conocer estos hechos es esencial para entender hacia dónde se dirige una de las economías más influyentes y cómo sus decisiones impactarán el futuro global.

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