Tinta y tinte de una mujerValeria Aime Tannos Díaz |
| 26 Dic 2023 - 09:07hrs
En estas fechas, que tanta gente espera por diferentes razones, hay un espíritu festivo que se impregna en las familias. Hay besos y abrazos que desvanecen separaciones de meses, a veces años, y también hay largos trayectos que se hacen para estar cerca de los seres queridos.
Nuestras ciudades brillan, literal y metafóricamente, borrando un poco así la tan pesada monotonía, al menos por unos días. Las calles de nuestra ciudades se llenan (y por ratos se vuelven a vaciar) al igual que nuestras casas.
Y ya sea que la razón para reunirse sea la noche buena, la navidad, el fin de año, o simplemente los días libres, la realidad es que en el ambiente hay, en mayor o menor medida, una agradable sensación de quietud, por no llamarla “tregua”.
Aprovechando esta quietud, me gustaría hacer una breve lista de mis deseos. Deseos que, en realidad son simples recomendaciones, que nos implican a ti y a mi, lector, y que deseo podamos cumplir desde ahora y en el año que viene.
Deseo que estas fechas sirvan para que procuremos ayudar en nuestras casas. ¿Por qué no ofrecerse para ayudar a la mamá, o a la abuela, para preparar la cena? Quizá bastaría con ayudar a servir la comida o limpiar la casa. El punto es procurar ser parte de la celebración desde su inicio.
Deseo también que en las familias deje de existir la idea de que hay temas prohibidos, porque, ¿con quién, sino con la familia, que es el nucleo social más básico podríamos hablar entonces de las cosas que creemos o sentimos?
Ojalá que el próximo año todos pongamos nuestro granito de arena para ser capaces de hablar y hasta discutir, respetando y siendo tolerante con quien hablamos.
Deseo, de igual forma, que estas fechas sirvan para ablandar nuestros corazones. Siempre habrá alguien que la esté pasando peor que nosotros, y tal vez no seamos muy adeptos a la filantropía, pero ¿qué daño nos haría tratar de ayudar a alguien?
Está claro que estos deseos son sobre todo objetivos que yo también procuraré llevar a la práctica, así que es un compromiso en conjunto.
Mi último deseo es para que, a todas las personas que leen estas palabras, y a aquellas que me han leído a lo largo de este año, pasen una muy feliz navidad. Deseo, de todo corazón, que estas fechas les llenen de felicidad, y también de todo aquello que necesiten para ser plenos.