Atorados en el pasado

Bitácora del director

Pascal Beltrán del Río

.

| 16 Ene 2023 - 08:41hrs

A 12 kilómetros del aeropuerto de El Prat, en la Zona Franca de Barcelona, se encuentra el primer Centro de Abastecimiento de Hidrógeno Verde de España.


Construida por Iberdrola e inaugurada hace un año, la hidrogeneradora surte de combustible limpio a la red de autobuses de la ciudad, Transports Metropolitans de Barcelona (TMB). La puesta en marcha de la planta se enmarca en los compromisos de España con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas en el ámbito industrial. Tanto el procesamiento del combustible como su uso en vehículos emiten cero gases de efecto invernadero.


El hidrógeno verde se ha colocado rápidamente a la cabeza de las energías limpias porque, a diferencia de la que se obtiene del sol y el viento, puede ser almacenada con relativa facilidad. La desventaja que aún tiene es que es caro de producir –y, por tanto, aún requiere de subsidio–, pero el desarrollo de tecnologías lo está abaratando a paso veloz.


Este combustible se obtiene a partir de fuentes de energía renovables. El método de producción más conocido es la electrólisis del agua, que consiste en la separación de la molécula de agua en sus componentes (hidrógeno y oxígeno) mediante la aplicación de corriente eléctrica en un dispositivo electroquímico denominado electrolizador.


Su uso se acelerará en los próximos años, pues grandes compañías navieras, como Maersk, han encargado la construcción de barcos que sólo utilizarán hidrógeno verde. La empresa danesa vaticina que sus emisiones anuales de CO2 se reducirán en 1.5 millones de toneladas, cuando dichos barcos comiencen a navegar en 2024. El transporte marítimo de mercancías es responsable del 3% de la emisión de gases de efecto invernadero a nivel mundial. Incluso se comienza a hablar de la fabricación de aviones impulsados por hidrógeno, que podrían estar en el mercado tan pronto como 2035.


Mientras todo esto está sucediendo en el mundo, México aún no ha tomado nota. Su gobierno no ha podido sacarse de la cabeza la explotación de combustibles fósiles y actualmente construye una de las escasas refinerías nuevas del mundo.


Esa visión no toma en cuenta el enorme negocio que podría ser para el país la producción de hidrógeno verde, pues el gobierno estadunidense está reconvirtiendo su planta industrial, con base en la Ley de Infraestructura, Inversión y Fuentes de Empleo, aprobada en noviembre de 2021, que contempla subsidios multimillonarios para el desarrollo de hidrógeno verde y otras energías limpias.


La reciente Cumbre de Líderes de América del Norte hubiera sido una gran oportunidad para sumarse a ese plan. Como digo, para hacer dinero, pero también para cumplir con los compromisos del país en materia de lucha contra el cambio climático; para ofrecer energía limpia a las empresas que buscan establecerse en México, y para cerrar la brecha de desarrollo entre el norte y el sur del país.


¿Por qué no pensar, por ejemplo, en el Istmo de Tehuantepec para producir el hidrógeno verde que se requiere en Estados Unidos? La zona tiene agua suficiente. También tienen abundante sol y fuertes vientos para usar en la producción de ese combustible. Y, por si fuera poco, dos puertos importantes –Salina Cruz y Coatzacoalcos– por donde el hidrógeno verde podría ser exportado a las dos costas de la Unión Americana. Eso, además, llevaría desarrollo sostenible a la región sur-sureste de la República.


Es una lástima que en la pasada cumbre hayan prevalecido los clichés ideológicos. Ojalá que el próximo gobierno, del partido que sea, entienda que ésta es una oportunidad de desarrollo que México no puede darse el lujo de dejar pasar.


BUSCAPIÉS


El sábado por la tarde, la jefa de Gobierno capitalina, Claudia Sheinbaum, tuiteó una foto en la que se le veía reunida con colaboradores y que llevaba adjunto el siguiente texto: “Trabajando con el equipo del Metro y la Secretaría de Finanzas (en) la agilización de todos los procesos de adquisición y entrega de materiales y refacciones del Metro”. Entonces, ¿los problemas no eran por sabotajes, sino por falta de mantenimiento?

Más entradas de Bitácora del director