![]() | Desde el CaféBernardo Gutiérrez Parra |
| 15 Abr 2025 - 11:18hrs
De 1968 a 2024, es decir, en el lapso de 56 años, sólo tres de los once gobernadores que tuvo la entidad se preocuparon por la educación: Rafael Murillo Vidal, Rafael Hernández Ochoa y Patricio Chirinos Calero. Fernando Gutiérrez Barrios implementó un plan educativo a mitad de su bienio al que su sucesor, Dante Delgado, no le dio continuidad.
Veracruz cuenta con 57 sindicatos de maestros cuyos líderes tienen la particularidad de que ninguno padece de quebrantos económicos. Es el estado que tiene más docentes, pero en contrapunto, es el que tiene más maestros “comisionados”.
Ocupa el primer lugar nacional en analfabetismo y rezago educativo, es segundo en niños que no terminan la primaria y tercero en adolescentes que no terminan la secundaria.
La Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) es la dependencia que recibe más presupuesto tanto federal como estatal. Pero desde hace lustros se ha convertido en la Caja Chica de varios gobernadores. Si algunos le dieron un pellizco a ese dinero, Fidel Herrera y Javier Duarte se jambaron con el presupuesto.
Eso sí, a jalones, empujones, pellizcos y jambadas la educación jalaba; a trompicones pero jalaba.
Pero con la llegada de la 4T el presupuesto de la SEV recibió una brutal tarascada y la educación retrocedió porque gran parte de ese dinero se ocupó para atender las necesidades del gobernador Cuitláhuac García y del titular de la dependencia, Zenyazen Escobar.
Uno de los organismos por donde se fue una incalculable millonada en el sexenio anterior es Maestros con Morena (MCM), compuesto en su mayoría por docentes “comisionados” que se dedicaron a pasear por todo el estado apoyando a Zenyazen en sus deseos por ser gobernador.
A pesar de que ya lo dije lo repito con mucho gusto; ser comisionado es el sueño de todo maestro porque percibe dos sueldos: el de su plaza como docente y el de comisionado.
En tiempos pretéritos, cada maestro comisionado era sustituido por otro para que diera clases en su lugar. Pero pagarle a un maestro sustituto cuesta una lana (más prestaciones, vacaciones, aguinaldo) que la SEV de Zenyazen no estaba dispuesta a pagar. Por lo que comenzaron a faltar maestros en primaria, secundaria y prepa mientras crecía la nómina de los comisionados.
¿Resultado? En la actualidad la escasez de maestros en las aulas se ha convertido en un grave problema de educación estatal.
A lo anterior hay que sumar a los aviadores que tiene la SEV, miles de los cuales cobraron por más de treinta años y ahora están felizmente jubilados a pesar de que nunca se pararon por un aula.
Esto lo sabe la gobernadora Rocío Nahle que ayer en conferencia de prensa dijo: “Algo estamos haciendo mal” y achacó el broncón educativo a un “problema estructural profundo”. Y vaya que lo es, pero no es de ahora sino que viene de lejos, aunque se agravó en el sexenio anterior.
En lugar de hablar para la grada prometiendo que llevará ante las autoridades a los responsables, Rocío Nahle dijo que su gobierno trabaja en reorganizar las plantillas docentes con el respaldo de los propios profesores y los sindicatos.
Agregó que desde que comenzó su administración encabeza reuniones semanales con directores de escuelas, a quienes escucha directamente para conocer los problemas de cada institución, lo que le permitirá tomar decisiones concretas.
Tarea titánica, ardua y agotadora que llevará muchos años, pero por algo está empezando la gobernadora.
Ya si después quiere entambar a Cuitláhuac y a Zenyazen por desviar multimillonarios recursos, eso será otro rollo que le agradecerán maestros, alumnos, padres de familia y la saqueada sociedad veracruzana. Porque lo que hizo este par con la educación en Veracruz es parecido a un crimen de lesa humanidad.
bernardogup@hotmail.com