Opinión CiudadanaBernardo Bellizzia Guzmán |
| 03 Abr 2023 - 07:50hrs
Desde 1996 cuando López Obrador tomaba las instalaciones de los pozos petroleros de PEMEX, pasando por las marchas exigiendo justicia para los pobres y el fin de un gobierno represor y autoritario, y las muchas tomas del Zócalo de la Ciudad de México. Andrés Manuel jamás se imaginó que se convertiría en una copia fiel de lo que siempre combatió, de lo que más odio y por lo que siempre lucho.
Hoy 30 años después de haber empezado una lucha social de la mano del pueblo. AMLO como ahora le dicen, ya siendo Presidente se ha transformado en un tirano, en un aspirante de reyerzuelo, en un autoritario represor y agresor, un sátrapa vividor del presupuesto que junto con su familia y amigos se están beneficiando todos los días. Resulto tristemente peor el remedio que la enfermedad.
A diario se empeña en tirar todo a la basura. Su lucha, su causa, su razón de marchar miles de veces en busca de la “justicia”. Pareciera que eso ya quedo en el olvido, lo ha guardado en el cajón de los recuerdos y lo ha desechado como un viejo y mal recuerdo que solo utilizo para acceder al poder. Esa es la imagen que da hacia afuera, esa es la idea que proyecta en todos los mexicanos. Andrés Manuel se ha convertido en un dictador que lo único que hace es buscar su beneficio y la de los suyos.
El grave problema para él es que su actitud en nada ayuda a sus candidatos presidenciales. Adán, Claudia y Marcelo, todos los días tienen que quitarse el estigma de ser bendecidos por Andrés, que no es poca cosa. Tratar de justificar lo que dice, hace y piensa. Una complicada situación para los tres más adelantados en la carrera presidencial. Pero además y estoy seguro que lo saben, hay muchas cosas en las que no están de acuerdo con el Presidente, pero no les queda de otra que justificar sus locuras. Saben de qué va de por medio sus carreras políticas, aunque ante la opinión publica queden mal parados.
Hoy podemos observar a un iracundo, enojado, resentido, frustrado y además enfermo Presidente de México. Su tiempo se agotó y lo único que logro fue dividir al País, en buenos y malos, en fifís y chairos, en conservadores y transformadores. En fin, hizo de este País un campo de futbol y como si fuera poco le prendió fuego. Lo que si podemos asegurar es que al día de hoy ya son miles de mexicanos que están completamente seguros de por quién no deben de votar en las próximas elecciones y esa es morena. Veremos qué pasa. Correo electrónico: bernardobellizzia@hotmail.com